Ya sean dos personas o más, quien sabe
Todos pasamos por un aro, en este caso
El aro es el de la confianza, el de creo en ti
Creo en tus palabras, sinceras y puras
Unas palabras cristalinas, transparentes
Haciendo honor a cada letra y cada coma
Brotan de mí las ideas, las imágenes
Rezan mi boca cual plegaria, con su musicalidad
Musicalidad que entran en tu cerebro y naufragan en tu corazón
Naufraga sin remedio, un salvavidas con una inscripción
La inscripción es tu salvación la de los dos
Ponen de manifiesto fe, esperanza, plenitud.
Confianza, confianza, confianza
Irrompible bajo el escudo y protegido por el techo
Techo del amor sufrido, fundado en las risas y lágrimas
Lágrimas de desengaños y mentiras contrastadas
Contrastadas por la verdad, una verdad resplandeciente
Juntos vencemos desde la lucha a base de respeto
Atrincherados en el amor mutuo que se vuelve recíproco
Al igual que un bumerang que lo lanzas y regresa
Confianza ciega con una venda atada a tus ojos
Atada fuertemente con un duro nudo caparazón casi irrompible
Pero aflojadas por el amor, la alegría y el sentimiento
Queriendo la ira, la desconfianza veneno
Con sus artimañas el odio, insultos y falta de respeto
A base de gritos y rabietas varias
De tos es sabido que tras la tempestad llega la calma
Y sale el sol que hacen brillar tus ojos
Esa mirada llena de luz y comprensión
Al final la victoria está en nuestras manos
La tuya, la mía, la de todos
Y grito: ¡VIVA!